Aunque el nombre suyo es ignoto para todos los amantes del rey de los deportes, sorprendidos con la decisión tomada por la Real Federación Española de Fútbol para nombrar al sucesor del dimitente Luis Enrique Martínez, el nuevo responsable de la selección nacional absoluta, Robert Moreno, manifiesta sentir ningún miedo por asumir las riendas del equipo sin contar con un amplio currículum para gestionar el vestuario compuesto por grandes jugadores ansiosos por lograr la revancha después de la frustrante participación cumplida en el Mundial de Rusia 2.018.
"Yo creo que sí tengo experiencia. He estado nueve años con Luis, en vestuarios de máximo nivel, entrenando a los mejores del mundo", señaló el flamante timonel de "La Roja" apreciando las experiencias vividas desde inicios de la década en calidad de asistente del saliente entrenador gijonés, con quien ganó práctica en el manejo de vitales aspectos laborales: "Entreno desde los 14 años y soñaba con ser primer entrenador en el fútbol de alto nivel. Me faltaba el conocimiento del vestuario y eso es algo que trató de inculcarme desde el primer día Luis. También he aprendido de él la relación con la prensa. A veces las oportunidades te llegan por caminos que no te gustan, pero por trabajo y profesionalidad no va a ser".
Si bien fue el principal colaborador de Luis Enrique en la A.S. Roma (2.011 - 2.012), el Celta de Vigo (2.012 - 2.014) y en el brillante período del 'Barça', comprendido del 2.014 al 2.017, Moreno está consciente de las dudas generadas en los aficionados y prensa a raíz del encargo hecho para convertirlo en principal cabeza de la formación hispana, y por ello con miras a revertir esa desconfianza asegura: "Si ganamos partidos, llegamos a la Eurocopa (2020) y la ganamos, nadie se acordará de si teníamos experiencia o no".
"Sé que pueden pensar que no tenemos la experiencia suficiente, pero yo no puedo controlar esto. Lo que puedo controlar mi trabajo, y en ese sentido estoy muy tranquilo porque sé que vamos a hacer un buen trabajo", agregó el joven adiestrador catalán de 40 años de edad para cerrar la intervención expresando cuan listo se halla para encarar este reto de alta exposición pública, lo cual sería aterrador para algunos:
"¿Miedo? No tengo miedo. Solo temo aquello que no se puede controlar".